Highland Park 16 años, Twisted Tattoo

Hoy toca hablar del Highland Park 16 años Twisted Tattoo que me compré durante un viaje a Londres en 2019. Cuando tengo la oportunidad de viajar a esa ciudad procuro visitar The Whisky Shop de la calle de Piccadilly, donde siempre me han atendido de maravilla, los vendedores son muy amables y normalmente puedes degustar varios whiskies para ayudarte a tomar una decisión informada. 

Cuando voy solo no tengo problema del tiempo que paso ahí, pero en esta ocasión me acompañó la familia y sentía una “ligera” presión por parte de esposa e hijos para poder continuar con las visitas del día. Eso no me detuvo y me tomé mi tiempo para probar varios whiskies que se ajustaban al perfil de lo que me gustaba, cosa que debe haberme tomado poco más de una hora... En esa ocasión me decidí por un Glendronach 12 años, que no he reseñado, y este Highland Park. 

Mi Twisted Tattoo tuvo que esperar todavía un año más para ser abierto el día del Padre de 2020 y lo he tomado muy ocasionalmente desde entonces, con la idea de que me dure lo más posible. Pero, a casi dos años de haberlo comprado, ya ameritaba una reseña ¿no crees? 

Primero te platico un poco sobre él. Este whisky es el resultado de una mezcla de whiskies terminados en barricas de vino de Rioja y barricas de bourbon, todas de primer llenado. En la caja se menciona que la mezcla se compone de 153 barricas de vino de Rioja y 70 de bourbon. Estas barricas fueron mezcladas en Septiembre de 2018, filtradas a 4 grados centígrados y embotelladas a 46.7 ABV. 

 Una cosa que me encanta es el diseño de la botella y del arte impreso en la misma. Otra cosa que me gusta es que el tapón de corcho, tiene además una ligera rosca, de tal manera que cierra de una manera más firme. Fue una lástima que la caja se dañara durante el transporte, pero bueno…

El color del Twisted Tattoo es natural en un tono dorado-rosado quemado muy bonito. Creo que no había visto otro whisky con esta característica. La marca asegura que el tono rosado es consecuencia del terminado en las barricas de vino de Rioja. En copa se ve viscoso. 

Al olerlo lo primero que llega es un aroma a vainilla y un ligero golpe de alcohol. Después aparecen notas frescas, florales. Aromas dulces y luego una ligera nota a cuero y a madera. 

En boca se siente espeso, especiado, con notas de vainilla y de dulce envinado y sí… el sabor recuerda a vino tinto. Aparece algo de fruta, pero no logro identificarla. Es un sabor bien definido El final es ligeramente amargo y medio. 

No quiero agregarle agua, porque creo que no la necesita… pero lo haré. 5 gotitas. 

¡Hey! Esto huele más a vino, la vainilla prácticamente se pierde, pero el aroma sigue siendo fresco, tal vez un poco más frutal ahora. Al probarlo las especias bajan muchísimo de intensidad y se disfruta más la vainilla, aparece una nota a durazno. El final continúa siendo ligeramente amargo y medio. El retro-gusto es de dulce envinado y ligeramente ahumado. 

 Conclusión: Un whiskazo, en toda la extensión de la palabra, aunque esta opinión puede estar algo sesgada porque los whiskies de Highland Park me encantan. Muy disfrutable, pero creo que no es para todos. Definitivamente es un whisky para después de comer y no recomendaría que sea para pasarse toda la tarde con él, porque creo que después de un par de copas te puede llegar a saturar si lo tomas solo. Con unas gotas de agua se vuelve mucho más amable. Siento que es un whisky para beber con mucha moderación, no por la gradación alcohólica sino por la intensidad de sabor. 

 Finalmente, yo creía que esta expresión de Highland Park era una oportunidad de una sola vez en la vida, sin embargo, lo he visto anunciado en Amazon México, por si te llega a interesar probarlo.