Buchanan's 12

 Por fin me decidí a hacer una reseña de este whisky. Ya con anterioridad había reseñado una versión del mismo, que recuperé de casa de mi madre y que data de los años ’60 o ’70. 

Pero el otro día me volví a topar con este Buchanan’s y decidí comprarlo, en parte para compararlo con ese antiguo whisky de casa de mi madre y en parte para ver qué tal está ahora.

Buchanan’s es una marca muy reconocida en nuestro subcontinente lationamericano, con muchos adeptos y también muchos detractores. Es uno de los whiskies que no puede faltar en ningún bar, cantina, discoteca o antro en México y un casi imperdible en la casa de la gran familia mexicana. Probado y vuelto a probar por todos, les guste o no, tiene un lugar privilegiado en este mercado.

¿Dónde me encuentro yo?

Mmmh…. Pues tendré que beberlo por enésima vez, pero por primera vez desde un punto de vista crítico.

Como datos generales: El Buchanan’s 12 es un Blended Scotch Whisky, embotellado al 40% ABV, obviamente con color añadido y filtrado en frío y su precio ronda los $ 1,000 MXN (aproximadamente $ 50 USD). Es importante señalar que por este dinero ya te compras un Glenfiddich 12, nada más como dato cultural.

Es un whisky de esos que te encuentras en prácticamente todas las presentaciones: desde la famosa anforita hasta el botellón de 5 litros.

Ahora vamos a probarlo, como siempre, primero solo y después con un poco de agua:

Nariz: De entrada es dulce, como caramelo o chicle tutti-frutti y con algunas notas amaderadas. Hay una nota alcohólica leve. Después aparecen aromas cítricos y notas frescas, perfumadas.

Boca: Es ligero, dulce, astringente y muy ligeramente especiado. Notas a dulce de leche y  a vainilla. Algo de nueces al final acompañado por la nota alcohólica.

Final: Corto, astringente y dulce. Las nueces permanecen. Después de un rato llegan notas a madera.

Ahora con un chorrito de agua fría:

En nariz pierde todo el chiste, los aromas se pierden casi totalmente, aunque permanece la nota dulce. No hay mucho más que decir. En boca se siente muy aguado, dulce con las notas a vainilla, dulce de leche y a nueces, pero más suaves. El alcohol se siente más y se vuelve algo amargo al final.

Conclusión:

¿Es un whisky tomable? Sí, es bastante disfrutable solo, si lo dejas reposar en la copa sus doce minutos reglamentarios (uno por cada año de añejamiento), recién servido sentirás el golpe de alcohol.

Definitivamente es un whisky diseñado para ser tomado sin mayores complicaciones, como sea: en las rocas, con agua mineral y tal vez hasta en algún coctel, pero es lo suficientemente digno para tomarlo solo, si aguantas la nota alcohólica, que si bien es leve, no deja de ser molesta para bebedores experimentados y sobre todo para los fans del single malt.

En mi caso particular: No me gusta en las rocas, siento que se vuelve amargo.

¿Soy fan? No, pero voy a mantener una botellita en casa para ofrecer a los bebedores ocasionales de whisky.