The Macallan A Night on Earth in Scotland

 

Cuando visité The Macallan Gallery a principios de noviembre pasado, me llamó mucho la atención una expresión de la marca que no había llegado, en ese entonces, a México y me encantó la presentación. Realmente el diseño del empaque sobresalía de entre otras de las expresiones ahí exhibidas y supuse que iba a ser bastante cara.

No fue así.

A principios de diciembre, ingresé a la tienda virtual de la marca y encontré que la expresión A Night on Earth in Scotland ya estaba disponible en México y es importante decir que sigue disponible al momento de escribir este post. El precio me sorprendió (está en los $ 2,100 MXN, unos $ 100 USD), al mismo tiempo que me hizo dudar un poco, ya que está ligeramente por arriba del 12 años Sherry Oak, que me gustó bastante, pero en este caso, no declara edad.

Con algo de suspicacia, me compré una botella. Es importante decir que el servicio proporcionado por The Macallan fue excelente y que recibí la botella a los (muy) pocos días. Con un seguimiento extraordinario por parte de la empresa.

En cuanto lo recibí, hice un unboxing en mi tristísimo canal de YouTube y lo publiqué simultáneamente en mi nada triste grupo privado de Facebook.

The Macallan se saca un 10 con el diseño de este empaque. Dieron en el clavo para el regalo perfecto para las fiestas de fin de año de 2021, pero ¿El contenido de la botella vale la pena?

No me voy meter en todo el tema del concepto de diseño y del diseño del producto porque The Macallan es muy claro en su página web y considero que lo más importante es que conozcas mi opinión personal, por lo que a continuación encontrarás mis impresiones:

El A Night on Earth in Scotland está embotellado a 40% ABV.

Color: Es natural, como todos los Macallan. En este caso es un ámbar dorado. Se aprecia una viscosidad media.

Nariz: Algo de mantequilla, algo de dulce envinado, algo de frutos secos. Ligero aroma a pan. Aparecen cítricos frescos, tipo naranja. Tiene una ligerísima nota a hierba fresca, también agua de río. Al final, llega algo de madera joven. Como casi todo Macallan, tiene un recuerdo de jerez.

En boca: Licoroso, dulce, ligeramente especiado. Los frutos secos están muy presentes, galleta de mantequilla (shortbread), cítricos, algo de vainilla. Poco astringente. 

El final es corto, pero rico. Se queda el retro-gusto a vainilla y a mantequilla.

Con unas gotas de agua: En nariz se acentúan las notas a pan, galleta de mantequilla. Cítricos. En realidad no cambia tanto. Aparentemente sí está filtrado en frío, porque no es enturbia al agregar agua fría.

En boca se aligera mucho. Se percibe mucho más la vainilla y la mantequilla. Se siente muchísimo el sabor a cáscara de naranja. Los frutos secos prevalecen. El especiado desaparece casi completamente y queda un whisky muy dulce. Un verdadero postre. El final se acorta de manera significativa.

No recomiendo poner hielos, ni mezclar con agua mineral, pero esa es mi opinión personal.

Definitivamente es un excelente “sipper”, muy disfrutable para esta época que acaba de pasar. No es un whisky para tomar con mucho espíritu crítico y sí para disfrutar en una larga sobre mesa con amigos… sobre todo amigos que no sean muy expertos en whisky pero que lo saben apreciar.

Un whisky que es un excelente regalo, al no ser tan caro, tener una presentación extraordinaria y ser un Macallan bastante digno, sin ser extraordinario. Vas a quedar muy bien con él siempre.