Johnnie Walker Green Label
Johnnie Walker es una de esas marcas que ofrece un rango de productos para casi cada gusto y bolsillo. En otras ocasiones, ya te he platicado mis impresiones de algunas expresiones de la marca y normalmente mis opiniones han sido favorables.
Hoy ha sido el turno de probar “científicamente” el Green Label. Y lo digo así, porque es una expresión que he disfrutado enormemente al tomarlo en varias ocasiones sin espíritu crítico. De hecho, nunca me había lanzado a comprar una botella hasta hace un par de semanas.
Es importante precisar que el Green Label es la única expresión de Johnnie Walker que es un blended malt, por lo que no contiene whiskies de grano en su mezcla. También es el único whisky de la gama de la marca que está embotellado a 43% ABV, cosa que se agradece. Como todos los whiskies de esta marca, está filtrado en frío y tiene colorante añadido. Finalmente es importante señalar que declara una edad de 15 años.
La mezcla de maltas está compuesta principalmente por Cragganmore, Linkwood, Talisker y Caol Ila, cosa que hace muy atractiva a esta expresión.
Por todo lo anterior, es un "must" probar este whisky.
Pero pasemos a probarlo.
A la vista se aprecia que tiene una viscosidad media.
En nariz: Lo primero que llega es una marcada nota a manzana verde. Posteriormente aparecen aromas marinos, salinos, algo de madera y otros aromas frutales frescos. Muy al final aparece un ligero aroma a turba. Realmente es una nariz bastante interesante y compleja.
En boca: De entrada es dulzón, miel, vainilla, con notas de pimienta, frutos secos. Posteriormente aparecen ligeras notas ahumadas y salinas. Realmente es lo que te puedes esperar de un buen whisky de malta.
Final: medio, amargón, frutos secos y un final marino, en el que se nota el Talisker.
Al agregar unas gotas de agua se vuelve mucho más fresco, las notas de manzana verde siguen ahí, pero más sutiles. Aparecen algunas notas herbales, como de pasto recién cortado, otras semejantes a goma de mascar, notas de madera vieja, algo de cereal. Creo que el aroma se vuelve más complejo con agua. En boca es mucho más dulce, aunque conserva las mismas notas que tiene al tomarse solo, sin embargo, aparecen algunas notas más medicinales y se vuelve un poco más astringente. El retrogusto es más a frutos secos y dulce. El final sigue siendo medio y rico.
En resumen: El Green Label es un whisky sumamente disfrutable que, con ganas de ejercitar el gusto, te sirve para jugar a identificar los sabores de los whiskies de malta que lo componen. De entrada, te puedo decir que definitivamente gana la influencia del Cragganmore, pero es interesante ver cómo salen de repente notas de Talisker o Caol Ila. Desafortunadamente no he tenido oportunidad de probar el Linkwood.
Lo puedes tomar solo o con unas gotas de agua, pero recomiendo tomarlo más con algo de agua, creo que ayuda a que se manifiesten más aromas y sabores.
En mi opinión es el mejor Johnnie Walker que puedes comprar y sí, me parece superior al Blue Label, pero, como siempre, esto es cuestión de gustos personales.
Comentarios
Publicar un comentario