Balvenie 12 Doublewood
Este Balvenie DoubleWood es uno de esos whiskies con los que he vivido un romance desde hace y muchos años ¡Y por muchos, me refiero a más de diez! Lo he comprado en múltiples ocasiones y siempre ha sido de mi agrado.
De hecho, alguna vez hasta me compré un Triple Wood en el Duty Free pensando que sería mejor… por aquello del “triple”, y fue una completa desilusión.
Pero ¿sigue siendo lo que yo creía?
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La Anécdota
Esta botella llegó a mí gracias a una tarjeta de regalo que recibí de mi tarjeta de crédito. Honestamente no sé a qué promoción correspondía, pero cayó en mi buzón, a mi nombre y al utilizarla en Amazon, resultó ser legítima.
Y sí, la botella que me llegó también es legítima. Digo esto porque me he enterado que hay quienes venden botellas fake en línea y llegan a pasar debajo del radar de las grandes tiendas como Mercado Libre o Amazon.
El Whisky
Embotellado a 43% ABV, el Balvenie 12 años DoubleWood está filtrado en frío y tiene colorante añadido.
¿Eso lo hace de menor calidad que otros whiskies?
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La cata
Aquí hay una segunda anécdota: al hacer esta cata, hubo un momento en que se me fue chueco. Casi me atraganto.... No estuvo padre, pero quien escribe es “todo un profesional” y eso no me detuvo ¡Ja, ja!
Para esta cata, dejé reposar el whisky por 15 minutos, vale la pena.
Nariz: súper frutal de entrada: manzana verde, algo de banana, zarzamoras. Miel, aromas frescos y florales. Algo de barniz, cuero y madera. Al final aparecen notas cítricas.
Nariz compleja.
Boca: Dulce envinado, miel. Cuerpo medio, algo de naranja amarga. La vainilla está presente. Tiene un dejo de vino de jerez al final. La especia es algo agresiva hacia el final. Sientes cómo se llenan tus papilas gustativas. Ligeramente astringente.
Final: Algo de chocolate amargo y especiado Es un final largo y rico.
Es un whisky muy bien pensado. Balanceado. Redondo. El que venga a 43% ABV es porque así es como se debe tomar, no hay más.
Con un chorrito de agua:
Nariz: Se torna más fragante, floral y fresco. Madera nueva. El cítrico sigue presente, pero más sutil, al igual que la fruta, que ahora me parece más semejante a la piña. Aparece una nota a pan Bimbo ligeramente tostado. La zarzamora aparece hasta el mero final.
Boca: Se vuelve más genérico con notas a miel, vainilla y sigue el dulce envinado, pero ya tirándole más a dulce de leche. Nota de naranjas amarga. Como sea, es delicioso.
Final: Se torna algo amargo, permanece la nota a chocolate y naranja. La astringencia sigue ahí, pero la especia casi desaparece.
Las conclusiones
Este es un whisky para disfrutar, de preferencia después de comer, hay que darle su tiempo y no apurarse con él. Si lo tomas recién servido, puede parecerte algo agresivo en alcohol, y nadie quiere eso.
No se agrega hielo, ni nada, pero claro, esta es sólo mi opinión personal.
¿Sigue siendo el whisky del que me acordaba? Sí, definitivamente. Después de varios años reconozco ese sabor.
¿El estar filtrado en frío y con colorante añadido lo hace de menor calidad? No, para nada ¡Es un whiskazo!
Hace unos años estaba entre mis Top 5… tal vez haya bajado un poco en mi ranking, el cual no es muy preciso que digamos, pero me queda claro que está en mi Top 10.
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